Lo veo claro como el agua. Después de asistir ayer a la ida
de semifinales ante el Chelsea y viendo el fútbol que despliega el Glorioso
desde mi butaca del fondo norte, el equipo me volvió a fascinar dadas las
circunstancias y el planteamiento del rival.
Todavía recuerdo a varios hinchas que conozco del PSG
después del buen partido de ida que hicieron ante el equipo de Mourinho y que
se las prometían muy felices con el 3-1. Estos equipos, inconscientemente, van
confiados cuando afrontan el partido de vuelta con ventaja. Que se lo digan si
no al Madrid frente al Borussia en la eliminatoria anterior. Por el contrario,
los equipos con desventaja plantean el partido de vuelta desde la épica y es
muy complicado jugarles. Ir tensionados con la eliminatoria empatada desde el
pitido inicial, es un factor clave en unas semifinales de Champions bajo mi
punto de vista.
Y aunque no contaremos con nuestro capitán Gabi, por cierto,
descansado para el partido contra el Levante en Liga (no hay mal que por bien
no venga), el eje Mario-Tiago (jugador éste del Chelsea hace años) será
garantía de éxito. Y con la creatividad que nos ofrecerán los Ardá, Ribas,
Villa o Sosa en distintas fases del partido, el gol o los goles acabarán
llegando. Eso sí, no olvidemos tirar más desde fuera del área, como así lo
hicimos en el partido de ida frente al Barcelona, y que nos dio un gol clave. Con todos estos factores, y ante el cerocerismo de ayer, estoy
seguro de que pasaremos la eliminatoria aunque ésa es una final todavía lejana en el tiempo.
Tenemos que solventar primero con éxito la de Mestalla este domingo. ¡¡¡Aúpa Atleti!!!
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