sábado, 14 de junio de 2014

EL ATLÉTICO DEL CHOLO


Todos los grandes equipos en la historia han sido identificados con su elemento más determinante. Por poner varios ejemplos, la Brasil de Zico y Sócrates, la de Pelé, la Francia de Zidane,  el Madrid de la Quinta, el Barça de Cruyff, el Atleti del Doblete y más recientemente, el Atlético del Cholo

Y yo me pregunto, ¿Cuáles han sido las principales aportaciones de este extraordinario entrenador? Más allá de las innovaciones tácticas, como ha sido la presión y el trabajo en todo el rectángulo de juego como algo imprescindible, es sin duda el elemento psicológico el que más ha pesado en el equipo. Y lejos de eso, dicho elemento lo ha proyectado a su vez a todos los estamentos del club, prensa y afición siendo la clave de este nuevo ciclo exitoso. 

Creo que muy pocos se han parado a analizar que parte de estos mensajes los lanza como un aficionado más, como un atlético de corazón. Cuando dice, si se trabaja y se cree, se puede, o cuando la mejor motivación para ganar un partido es ponerse la rojiblanca, o que este equipo históricamente siempre ha sido asociado a la lucha y a no darse nunca por vencido, lo que pretende es que estos valores perduren ya para siempre en la mentalidad atlética. Porque con el Doblete se murió de éxito y caímos en una falta de identidad absoluta que tuvo como consecuencia la estancia durante dos años en segunda división (intervención judicial incluida).



Esta nueva doctrina, el Cholismo, va más allá del propio Cholo y pretende el estar en un permanente estado de ebullición para seguir consiguiendo triunfos.  Porque algún día, nos guste o no, Simeone dejará el club y debemos estar preparados para ello. Ahora mismo es algo impensable ya que la mayoría de aficionados, independientemente de ganar títulos o no, se sienten identificados al 100% con su entrenador pero lo verdaderamente importante, no es un determinado jugador, varios o el entrenador. Es esta seña de identidad, la esencia atlética en definitiva,  la que nos mantendrá siempre arriba.

Y de ahí, a ser un equipo de leyenda, hay solo un paso. 

¡¡¡Forza Atlético!!!     ¡¡¡Aplata Atleti!!!


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