Gran victoria la alcanzada ayer por el Atlético de Madrid en Lyon frente al Olympique de Marsella. Por fin llegó ese ansiado título después de cuatro años que sobre todo nos permitirá saber la dimensión competitiva tan extraordinaria de los pupilos de Simeone en Tallin (Estonia) allá por el mes de agosto, cuando disputemos la Supercopa europea. Segunda parada para seguir con rumbo fijo hacia la tan deseada Champions de la temporada 18-19 con final en el Metropolitano.
Ya lo dije en mi anterior artículo, "Atleti, sólo ante el peligro". Basta que nos lo pusieran tan difícil para que este equipo se alzara con la victoria de la manera más contundente. Gabi, Lucas, Juanfran, Koke y especialmente Griezmann supieron interpretar perfectamente lo que necesitó el partido en cada momento al igual que el resto de compañeros. Y Germán Burgos, el hombre tranquilo que supo dirigir la orquesta de manera brillante al igual que su jefe. Puro Atleti.
Toca también ahora acertar con los fichajes que estén por llegar y retener a la mayoría de esta plantilla, especialmente al astro francés y el cancerbero esloveno. Creo que la cosa va por buen camino. Estoy seguro que cumpliendo estas premisas, optaremos a todos los títulos la temporada que viene con especial determinación en la máxima competición europea.
Fernando Torres, leyenda colchonera y máxima expresión de lo que es el Atleti al entregarse en cuerpo y alma durante toda su vida deportiva. Gracias por darnos tanto y mucha suerte ante tus nuevos retos.
Disfruten amigos colchoneros de lo recién conseguido y los éxitos por llegar. Enhorabuena a todos.
Forza Atleti.
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